Caricatura de Helioflores en El UniversalAsí viene la sìntesis de artículos:
Legionarios, viga y paja
El Universal, p. 19/Primera
Esteban Moctezuma Barragán
Los Legionarios de Cristo tienen hoy una oportunidad: reflexionar con humildad qué aprendizaje pueden obtener de la mayor crisis en su historia. El dicho afirma: “En el pecado se lleva la penitencia”. Y el gran pecado de los Legionarios fue haber negado durante mucho tiempo hechos evidentes. No se pone en duda que la agrupación religiosa está integrada, en su mayoría, por personas valiosas, que buscan hacer del servicio su forma de vida. Ellos no son responsables de la conducta de su superior. No son culpables de un sinnúmero de faltas y delitos que perpetuó su fundador. Pero muchos sí prestaron oídos sordos a decenas de personas que afirmaban, con su testimonio vivo, haber sido víctimas de los vicios de Marcial Maciel y eso deben reconocerlo.
Blindar manifestaciones
Reforma, p. 19/Primera - Opinión
Carlos Elizondo Mayer-Serra
Para proteger a la política del narco hemos supuestamente blindado las elecciones. Me parece un blindaje poroso, pero ojalá esté equivocado y podamos transitar las elecciones sin que el dinero del narco se meta en el proceso financiando campañas. Sin embargo, lo que se debe blindar es la actividad política en su conjunto. En particular una de sus caras más visibles: las movilizaciones que piden algo bloqueando las vías de comunicación. Se trata de un negocio redondo, porque por lo menos se obtiene publicidad gratis, aunque en general, el manifestante se lleva dinero y otros beneficios. Para partidos políticos en elecciones competidas, poder movilizar a electores adicionales puede hacer la diferencia. Por ello, la capacidad de movilización del PRI es una ventaja en una elección con alta abstención como suelen ser las intermedias. Por eso el PAN en Nuevo León sigue cortejando a Elba Esther Gordillo.
Vientos del sur
El Universal, p. 19/Primera
Jorge Montaño
La concentración mediática en las actividades perversas del crimen organizado en contra el Estado mexicano genera, entre otras cosas, desinterés acerca de acontecimientos importantes que están ocurriendo en Latinoamérica. La crisis argentina se ha soslayado, ignorando los riesgos que conlleva la confrontación del gobierno con los sectores productivos exportadores, mientras la presidenta está inmersa en la inflexibilidad provocada por lo que parecía una estancia inobjetable de los Kirchner en la Casa Rosada.
El disgusto
Reforma, p. 18/Primera - Opinión
Rafael Segovia
Se debe soportar la crisis sin protestar porque nos la enviaron desde fuera, con una maldad inimaginable. La de Calderón podía haber sido una experiencia única, fuera de todo lo conocido. Hubo una mala suerte, un destino torcido que se empeñó en caer entre el final de una presidencia desastrosa, como la de Bush, y una llena de promesas, como la de Obama. A esto súmese una crisis financiera que no se acaba de manifestar. Justo viene una inflación de la que no conviene hablar y los habitantes de este triste país se encuentran con la obligación de guardar silencio. Por si fuera poco, algunos hombres sí hablan y critican y critican con mesura, con elegancia, pero con mesura. Otros no, y estos resultan ser ministros. Lo hacen por orden superior o no.
Dinero y poder
Reforma, p. 17/Primera
Ezra Shabot
La acumulación de capital y la posibilidad de imponer medidas obligatorias a la sociedad en su conjunto, conforman una relación compleja entre estos dos elementos: el dinero y el poder. El espacio de la economía y el de la política si bien están separados por su objetivo específico, se encuentran estrechamente vinculados por la influencia que uno ejerce sobre otro. Mientras que el dinero se ubica principalmente en el terreno de lo privado, el poder se concibe como un instrumento público destinado a fijar normas obligatorias para todos y que permitan la coexistencia de intereses distintos y a veces opuestos dentro del marco del Estado.
Más que las bolsas
Reforma, p. 17/Primera
Manuel J. Jáuregui
Las bolsas de valores van en caída libre: ¡aquí, allá y acullá! Sin embargo, a nuestro gusto esto no es lo más crítico que está pasando, ya que normalmente estos indicadores suelen exagerar el optimismo o el pesimismo reinante entre los inversionistas. Lo verdaderamente preocupante es lo que está detrás de los desplomes y de la incapacidad de las bolsas para recuperar terreno: una terrible CRISIS DE CONFIANZA. Una que es generalizada, profunda y arraigada: AQUÍ no hay confianza en la capacidad del Gobierno para guiarnos a puerto seguro, como tampoco en la solvencia de las instituciones financieras o en la capacidad de resistencia a la crisis de las empresas. Esta crisis de confianza genera en la ciudadanía temor e incertidumbre afectando su capacidad para actuar en forma racional.
Clase media feliz...
El Universal, p. 19/Primera
José Sarukhán
Buscando información sobre la percepción de la sociedad de los problemas ambientales que nos afectan global y localmente, di con una encuesta sobre el tema emitida hace una semana por la fundación Pew, en colaboración con The Economist, pero también sobre la percepción de otros temas tan variados como la democracia, la religión o la homosexualidad (http://pewglobal.org/middleclass/). El estudio comprende 13 países, entre ellos México. Se definió a la clase media (CM) como los hogares con ingresos de 4 mil 286 dólares al año o más, y para comparación con el nivel inferior de ingresos se consideró a este tipo como los hogares que no llegaban al umbral de la CM. Uno de los hallazgos del estudio es que la gente tiende a poseer opiniones diferentes acerca de la democracia y otros tópicos sociales, una vez que han alcanzado un cierto nivel económico.
Catastrofismos
La Jornada, p. 14/Opinión
Jorge Camil
El Presidente criticó el día de la Constitución a quienes en el contexto de la crisis se convierten en agoreros de males y calamidades. “Catastrofistas”, los llamó, y los responsabilizó del “catastrofismo sin fundamento”, que daña sensiblemente al país y su imagen internacional, ahuyenta inversiones y destruye empleos. Pidió “hacer a un lado el alarmismo que ignora los esfuerzos de todos”. Pero días después, en el marco del foro legislativo México ante la crisis: ¿qué hacer para crecer?, saltó la liebre donde menos se esperaba. Alguien que maneja el tema como pocos, y de quien jamás se podría decir que habla de cuestiones económicas “sin fundamento”, anunció el apocalipsis. Y con la gravedad de quien va recitando mecánicamente las siete plagas bíblicas de la ira de Dios, el agorero pronosticó, sin buena sintaxis, pero con pleno conocimiento de causa, un rosario de desdichas (…)
¿México ante la crisis?
El Financiero, p. 27/Opinión
David Colmenares Páramo
Esta semana terminó el Foro México ante la Crisis convocado por el Senado de la República encabezado por Manlio Fabio Beltrones, Gustavo Madero y Carlos Navarrete, cuyas conclusiones retoman opiniones vertidas por algunos de sus invitados, las cuales apuntan, al igual que en la Convención Nacional Hacendaria -claro, en un ejercicio no abierto-, medidas de carácter administrativo y otras que tendrán que llegar forzosamente al Congreso de la Unión, ojalá que con mayor suerte que las de la CNH de 2004. Destaca lo que llaman Reformas Legislativas inmediatas y los compromisos de mediano plazo, paquete en medidas que tardarán todavía meses en procesarse en ambas cámaras, y en el caso de los diputados ya le tocará a la LXI Legislatura procesar los cambios más profundos.
Backyard: una mirada necesaria
Milenio Diario, p. 13/Opinión
Epigmenio Ibarra
Hoy, justo cuando el gobierno -empeñado a fondo en su campaña electoral y a punta de un discurso propagandístico- se bate a brazo partido contra aquellos que, según el propio Felipe Calderón, sobredimensionan el problema de la violencia del crimen organizado en el país, o que “agoreros del desastre” hacen pública su profunda preocupación sobre los devastadores efectos de la crisis económica y social que vivimos; hoy, digo, cuando la línea es cerrar los ojos, no ver, no hablar y menos todavía atreverse a contar lo que sucede, como si negarse a mirar hiciera a la realidad de otra manera, más a modo de quienes buscan solamente asegurar sus cuotas de poder, llega a las salas de cine Backyard; el traspatio, una película que escrita por Sabina Berman y dirigida por Carlos Carrera, es una mirada profunda, intensa, que no hace concesiones, que revisita una zona tan oscura como vigente de la realidad nacional: un doloroso rayo de luz en estos tiempos en que nos quieren convencer a todo trance de que lo más conveniente es la ceguera.
Los tres hermanos: cuento zurcido con retales
Excélsior, p. 25/Primera
Clara Scherer
Retal amarillo. Le tocó al menor de los tres. Está en una de las esquinas, la que da a la izquierda. Como todo hermano menor que se respete, le encanta imitar las bravuconadas de su hermano mayor. Pero, claro, lo que en uno impone miedo, en el otro hace sonreír. Los pequeños, por mucho que se esfuercen, nunca podrán abandonar ese lugar: hermano menor. Retal azul. Sí, es para el hermano segundo. El de en medio. Mediano hasta en las intenciones. Aunque, para cuando llegó al mundo, la situación familiar era un poco más boyante y, por ello, tuvo “oportunidad” de asistir a escuelas privadas, aun cuando la verdad es que los maestros seguían siendo los mismos. Eso sí, de religión aprendió mucho más que su hermano mayor. O, quizás, no mucho más, pero sí supo y sabe del valor de defender, desde cualquier puesto, sus creencias. Páralos ojos de sus maestros, compañeros, parientes, obispos y arzobispos.
Legionarios, viga y paja
El Universal, p. 19/Primera
Esteban Moctezuma Barragán
Los Legionarios de Cristo tienen hoy una oportunidad: reflexionar con humildad qué aprendizaje pueden obtener de la mayor crisis en su historia. El dicho afirma: “En el pecado se lleva la penitencia”. Y el gran pecado de los Legionarios fue haber negado durante mucho tiempo hechos evidentes. No se pone en duda que la agrupación religiosa está integrada, en su mayoría, por personas valiosas, que buscan hacer del servicio su forma de vida. Ellos no son responsables de la conducta de su superior. No son culpables de un sinnúmero de faltas y delitos que perpetuó su fundador. Pero muchos sí prestaron oídos sordos a decenas de personas que afirmaban, con su testimonio vivo, haber sido víctimas de los vicios de Marcial Maciel y eso deben reconocerlo.
Blindar manifestaciones
Reforma, p. 19/Primera - Opinión
Carlos Elizondo Mayer-Serra
Para proteger a la política del narco hemos supuestamente blindado las elecciones. Me parece un blindaje poroso, pero ojalá esté equivocado y podamos transitar las elecciones sin que el dinero del narco se meta en el proceso financiando campañas. Sin embargo, lo que se debe blindar es la actividad política en su conjunto. En particular una de sus caras más visibles: las movilizaciones que piden algo bloqueando las vías de comunicación. Se trata de un negocio redondo, porque por lo menos se obtiene publicidad gratis, aunque en general, el manifestante se lleva dinero y otros beneficios. Para partidos políticos en elecciones competidas, poder movilizar a electores adicionales puede hacer la diferencia. Por ello, la capacidad de movilización del PRI es una ventaja en una elección con alta abstención como suelen ser las intermedias. Por eso el PAN en Nuevo León sigue cortejando a Elba Esther Gordillo.
Vientos del sur
El Universal, p. 19/Primera
Jorge Montaño
La concentración mediática en las actividades perversas del crimen organizado en contra el Estado mexicano genera, entre otras cosas, desinterés acerca de acontecimientos importantes que están ocurriendo en Latinoamérica. La crisis argentina se ha soslayado, ignorando los riesgos que conlleva la confrontación del gobierno con los sectores productivos exportadores, mientras la presidenta está inmersa en la inflexibilidad provocada por lo que parecía una estancia inobjetable de los Kirchner en la Casa Rosada.
El disgusto
Reforma, p. 18/Primera - Opinión
Rafael Segovia
Se debe soportar la crisis sin protestar porque nos la enviaron desde fuera, con una maldad inimaginable. La de Calderón podía haber sido una experiencia única, fuera de todo lo conocido. Hubo una mala suerte, un destino torcido que se empeñó en caer entre el final de una presidencia desastrosa, como la de Bush, y una llena de promesas, como la de Obama. A esto súmese una crisis financiera que no se acaba de manifestar. Justo viene una inflación de la que no conviene hablar y los habitantes de este triste país se encuentran con la obligación de guardar silencio. Por si fuera poco, algunos hombres sí hablan y critican y critican con mesura, con elegancia, pero con mesura. Otros no, y estos resultan ser ministros. Lo hacen por orden superior o no.
Dinero y poder
Reforma, p. 17/Primera
Ezra Shabot
La acumulación de capital y la posibilidad de imponer medidas obligatorias a la sociedad en su conjunto, conforman una relación compleja entre estos dos elementos: el dinero y el poder. El espacio de la economía y el de la política si bien están separados por su objetivo específico, se encuentran estrechamente vinculados por la influencia que uno ejerce sobre otro. Mientras que el dinero se ubica principalmente en el terreno de lo privado, el poder se concibe como un instrumento público destinado a fijar normas obligatorias para todos y que permitan la coexistencia de intereses distintos y a veces opuestos dentro del marco del Estado.
Más que las bolsas
Reforma, p. 17/Primera
Manuel J. Jáuregui
Las bolsas de valores van en caída libre: ¡aquí, allá y acullá! Sin embargo, a nuestro gusto esto no es lo más crítico que está pasando, ya que normalmente estos indicadores suelen exagerar el optimismo o el pesimismo reinante entre los inversionistas. Lo verdaderamente preocupante es lo que está detrás de los desplomes y de la incapacidad de las bolsas para recuperar terreno: una terrible CRISIS DE CONFIANZA. Una que es generalizada, profunda y arraigada: AQUÍ no hay confianza en la capacidad del Gobierno para guiarnos a puerto seguro, como tampoco en la solvencia de las instituciones financieras o en la capacidad de resistencia a la crisis de las empresas. Esta crisis de confianza genera en la ciudadanía temor e incertidumbre afectando su capacidad para actuar en forma racional.
Clase media feliz...
El Universal, p. 19/Primera
José Sarukhán
Buscando información sobre la percepción de la sociedad de los problemas ambientales que nos afectan global y localmente, di con una encuesta sobre el tema emitida hace una semana por la fundación Pew, en colaboración con The Economist, pero también sobre la percepción de otros temas tan variados como la democracia, la religión o la homosexualidad (http://pewglobal.org/middleclass/). El estudio comprende 13 países, entre ellos México. Se definió a la clase media (CM) como los hogares con ingresos de 4 mil 286 dólares al año o más, y para comparación con el nivel inferior de ingresos se consideró a este tipo como los hogares que no llegaban al umbral de la CM. Uno de los hallazgos del estudio es que la gente tiende a poseer opiniones diferentes acerca de la democracia y otros tópicos sociales, una vez que han alcanzado un cierto nivel económico.
Catastrofismos
La Jornada, p. 14/Opinión
Jorge Camil
El Presidente criticó el día de la Constitución a quienes en el contexto de la crisis se convierten en agoreros de males y calamidades. “Catastrofistas”, los llamó, y los responsabilizó del “catastrofismo sin fundamento”, que daña sensiblemente al país y su imagen internacional, ahuyenta inversiones y destruye empleos. Pidió “hacer a un lado el alarmismo que ignora los esfuerzos de todos”. Pero días después, en el marco del foro legislativo México ante la crisis: ¿qué hacer para crecer?, saltó la liebre donde menos se esperaba. Alguien que maneja el tema como pocos, y de quien jamás se podría decir que habla de cuestiones económicas “sin fundamento”, anunció el apocalipsis. Y con la gravedad de quien va recitando mecánicamente las siete plagas bíblicas de la ira de Dios, el agorero pronosticó, sin buena sintaxis, pero con pleno conocimiento de causa, un rosario de desdichas (…)
¿México ante la crisis?
El Financiero, p. 27/Opinión
David Colmenares Páramo
Esta semana terminó el Foro México ante la Crisis convocado por el Senado de la República encabezado por Manlio Fabio Beltrones, Gustavo Madero y Carlos Navarrete, cuyas conclusiones retoman opiniones vertidas por algunos de sus invitados, las cuales apuntan, al igual que en la Convención Nacional Hacendaria -claro, en un ejercicio no abierto-, medidas de carácter administrativo y otras que tendrán que llegar forzosamente al Congreso de la Unión, ojalá que con mayor suerte que las de la CNH de 2004. Destaca lo que llaman Reformas Legislativas inmediatas y los compromisos de mediano plazo, paquete en medidas que tardarán todavía meses en procesarse en ambas cámaras, y en el caso de los diputados ya le tocará a la LXI Legislatura procesar los cambios más profundos.
Backyard: una mirada necesaria
Milenio Diario, p. 13/Opinión
Epigmenio Ibarra
Hoy, justo cuando el gobierno -empeñado a fondo en su campaña electoral y a punta de un discurso propagandístico- se bate a brazo partido contra aquellos que, según el propio Felipe Calderón, sobredimensionan el problema de la violencia del crimen organizado en el país, o que “agoreros del desastre” hacen pública su profunda preocupación sobre los devastadores efectos de la crisis económica y social que vivimos; hoy, digo, cuando la línea es cerrar los ojos, no ver, no hablar y menos todavía atreverse a contar lo que sucede, como si negarse a mirar hiciera a la realidad de otra manera, más a modo de quienes buscan solamente asegurar sus cuotas de poder, llega a las salas de cine Backyard; el traspatio, una película que escrita por Sabina Berman y dirigida por Carlos Carrera, es una mirada profunda, intensa, que no hace concesiones, que revisita una zona tan oscura como vigente de la realidad nacional: un doloroso rayo de luz en estos tiempos en que nos quieren convencer a todo trance de que lo más conveniente es la ceguera.
Los tres hermanos: cuento zurcido con retales
Excélsior, p. 25/Primera
Clara Scherer
Retal amarillo. Le tocó al menor de los tres. Está en una de las esquinas, la que da a la izquierda. Como todo hermano menor que se respete, le encanta imitar las bravuconadas de su hermano mayor. Pero, claro, lo que en uno impone miedo, en el otro hace sonreír. Los pequeños, por mucho que se esfuercen, nunca podrán abandonar ese lugar: hermano menor. Retal azul. Sí, es para el hermano segundo. El de en medio. Mediano hasta en las intenciones. Aunque, para cuando llegó al mundo, la situación familiar era un poco más boyante y, por ello, tuvo “oportunidad” de asistir a escuelas privadas, aun cuando la verdad es que los maestros seguían siendo los mismos. Eso sí, de religión aprendió mucho más que su hermano mayor. O, quizás, no mucho más, pero sí supo y sabe del valor de defender, desde cualquier puesto, sus creencias. Páralos ojos de sus maestros, compañeros, parientes, obispos y arzobispos.
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