jueves, julio 09, 2009

Comentocracia: Pa' priístas gobernando, mejor el PRI

Caricatura de Magú en La Jornada


Así viene la síntesis de artículos:

Pa' priistas gobernando, mejor el PRI

Reforma, p. 10/Primera - Opinión
Jorge G. Castañeda
Mientras no contemos con análisis de las encuestas de salida del domingo, todo será especulación sobre los motivos que llevaron a tantos votantes a dejar al PAN y al PRD, y entregarse al PRI, al Verde o al voto nulo. Mi especulación es que entre muchos factores que pueden explicar la deserción de panistas existe una más interesante que otra. La podríamos resumir así: pa' priistas en el gobierno, pues mejor el PRI. Podría dar varios ejemplos de lo que muchos hemos llamado la restauración priista -reverencia por los ritos, grupo de amigos al mando, política exterior tradicional- pero quisiera insistir en uno: el creciente abandono del respeto por los derechos humanos. Me centraré en un aspecto que me resulta especialmente indignante, ya que me incumbe, aunque indirectamente. (…)


Democracia en riesgo

El Universal, p. 23/Opinión
Luis Maldonado Venegas
El golpe perpetrado el domingo 28 de junio en contra de Manuel Zelaya, presidente de Honduras, provocó que los perfiles ideológicos más divergentes condenaran el hecho: de Barack Obama a Fidel Castro, pasando por Felipe Calderón, Hugo Chávez, Álvaro Uribe, Michelle Bachelet, Cristina de Kirchner y Evo Morales, entre otros, por no hablar de mandatarios de la Unión Europea. ¿Por qué? Porque el golpe hondureño irrumpe en el escenario americano después de casi 25 años de inalterable calma chicha. Y ocurre justo cuando aquí, allá y acullá brotan señales de alerta que nos advierten que nuestras democracias (electorales, directas o maquilladas), salvo casos excepcionales como el de Chile, están siendo fiscalizadas, presionadas, exigidas por una sociedad profundamente insatisfecha, harta de simulaciones y engaño.

El desenlace electoral

El Universal, p. 23/Opinión 1
Emilio Rabasa Gamboa
A diferencia de lo que ocurrió en la noche de la elección 2006, en la del 5 de julio 2009, y durante la jornada electoral, el IFE tuvo un buen desempeño ante una votación de protesta dirigida a destinatarios diversos. Los resultados electorales empezaron a fluir a tal velocidad por las encuestas de salida y el PREP, que apenas pasadas las 9 pm ya se empezaban a perfilar las sorpresivas tendencias. El final de la jornada ya es conocido: la pasmosa victoria del PRI (mayoría absoluta con el Verde en la Legislatura federal, cinco de seis gubernaturas, los corredores azul y el amarillo en el estado de México y más de 10 importantes alcaldías recuperadas) aunada a su aplastante derrota en el DF (ni una delegación, ninguna curul federal y ninguna curul local por mayoría). La debacle panista en todos los frentes, por debajo de su menor nivel histórico desde 1997 (150 curules) en el 2003 con Fox. La caída del PRD (12.2%) también por debajo de su nivel histórico en 1991, esto es, un retroceso de 18 años. (…)

Lo que provocaron los votos

El Universal, p. 22/Opinión
Javier Aparicio
Con los datos del cierre del PREP todo parece indicar que el PAN obtendrá 71 curules de mayoría relativa, 66 menos que las que obtuvo en 2006. La coalición PRI-PVEM, por otro lado, obtendrá 187 diputaciones de mayoría relativa, 122 más de las que obtuvo hace tres años. La distribución de curules de representación proporcional es algo más complicada, puesto que el PRI llegará al tope de sobrerrepresentación que marca la ley (8%). Las encuestadoras nos tendrán que explicar por qué casi ninguna pudo anticipar una brecha de más de 8 puntos porcentuales entre PRI y PAN. Más allá, comprender cómo 3 millones de votos se traducen en más de 100 curules de diferencia requiere un análisis más cuidadoso.


Caricatura de Francisco Calderón

Los medios


Reforma, p. 11/Primera - Opinión
Guadalupe Loaeza
“Es que son órdenes del patrón, señora. Usted sabe que mi jefe la quiere mucho, pero hay una lista de los únicos candidatos que él puede entrevistar”, me dijo la secretaria de uno de los conductores más vistos de la televisión mexicana. “Ay, pero por favor no le diga que le dije...”, agregó la señorita nerviosamente antes de colgar. No me sorprendió lo que me había dicho esta secretaria tan indiscreta pero tan solidaria a la vez, sólo confirmé lo que ya sabía: la falta de equidad en la contienda electoral. Esta situación la fuimos encontrando a lo largo de toda la campaña, hay que decir, no obstante, que sólo en el Canal 40, MVS y Milenio me abrieron sus puertas, pero en lo que se refiere a Televisa y TV Azteca, las órdenes superiores siempre fueron muy claras. Lo mismo sucedía con algunos espacios noticiosos de la radio. Por ejemplo, en el de Joaquín López-Dóriga no logré siquiera a tener derecho a réplica a pesar de múltiples alusiones en mi contra y de haber insistido personalmente hablar con él. Con algunos diarios capitalinos también obtuve la misma respuesta negativa.

Un producto, dos envolturas

Reforma, p. 11/Primera - Opinión
Carlos Elizondo Meyer-Serra
La alianza entre el Partido Verde y el PRI dominará la Cámara de Diputados. Esta alianza también hizo posibles algunos de los triunfos de gubernaturas del PRI y será clave para el Revolucionario Institucional, en caso de mantener esta alianza, para ganar estados como Chihuahua, donde el Verde obtuvo el 11 por ciento de los votos y hay elecciones para gobernador el año entrante. ¿Qué comparten ambos partidos ahora tan cercanos? En historia y programa casi nada. El Verde nunca ha sido gobierno. Ni siquiera parece que le interese tener posiciones en el Ejecutivo. Si bien ayudaron a que Fox llegara al poder, lo abandonaron muy pronto, sin que quedara claro cuál fue la diferencia programática o los espacios en el Ejecutivo que no tuvieron. Lo suyo es el Legislativo. Pero sobre todo el manejo del partido y sus prerrogativas.

Elogio de lo que no se ve

Reforma, p. 10/Primera - Opinión
JOSÉ WOLDENBERG
Mientras no contemos con análisis de las encuestas de salida del domingo, todo será especulación sobre los motivos que llevaron a tantos votantes a dejar al PAN y al PRD, y entregarse al PRI, al Verde o al voto nulo. Mi especulación es que entre muchos factores que pueden explicar la deserción de panistas existe una más interesante que otra. La podríamos resumir así: pa' priistas en el gobierno, pues mejor el PRI. Podría dar varios ejemplos de lo que muchos hemos llamado la restauración priista -reverencia por los ritos, grupo de amigos al mando, política exterior tradicional- pero quisiera insistir en uno: el creciente abandono del respeto por los derechos humanos. (…)


Lecturas (posibles) de la elección

Milenio Diario, p. 19/Opinión
Diódoro Carrasco Altamirano
Existe, sin duda, un cúmulo de causas y razones para explicar la magnitud de la derrota del partido en el gobierno en las elecciones del 5 de julio y el triunfo contundente del Partido Revolucionario Institucional. Sin embargo, son tres o cuatro a mí entender las principales. La primera es la magnitud de la crisis económica, que sólo este año ha arrasado con 650 mil empleos y que amenaza con llevar el PIB a un decrecimiento de menos 7%. La segunda es la capacidad operativa de los gobernadores del PRI, que haciendo uso generoso de su nuevo poder territorial se han despachado “con la cuchara grande”, en el apoyo a sus candidatos, factor que poco se refleja en las encuestas). La tercera es la fractura de la izquierda y la descomposición actual del PRD, que pasó de más de 30% de los votos en la elección del 20&6 a un lamentable 12.3% en la que culminó el domingo pasado.

¿Qué dice la izquierda?

La Jornada, p. 23/Opinión
Adolfo Sánchez Rebolledo
Millones de electores que apoyaron a la coalición Por el Bien de Todos en 2006 no revalidaron su decisión de apoyar un cambio por la izquierda. O bien se abstuvieron, o anularon la boleta o prefirieron votar al PRI. Sumados, los votos efectivos de la izquierda (PRD, PT, Convergencia) arañan 20 por ciento del total, pero la idea de conformar un amplio frente de izquierda ha sido superada por los antagonismos partidistas y los conflictos intestinos. Junto con el PAN, el PRD -y en él se incluyen todos sus líderes- es el gran perdedor de esta contienda. A la evidencia de su escasa e inamovible implantación nacional se añade ahora la pérdida de posiciones en sus antiguos cotos de influencia (que aún lo salvan de un desastre mayor).

Por los errores de otros

La Jornada, p. 22/Opinión
Octavio Rodríguez Araujo
El PRI ganó en buena medida por los errores de los panistas en los gobiernos, comenzando por Calderón, y los todavía mayores errores del PRD, cuyos dirigentes actuales hicieron maroma y teatro para quedar donde están en lugar de haber pensado en el fortalecimiento de su partido para cumplir con su cometido: competir por el poder con la mayor fuerza posible. El PRD no sólo está en crisis por haber pasado del nivel de votación al que lo llevó López Obrador en 2006 a un ridículo 12 y pico por ciento, sino que estuvo por debajo del Partido Verde en algunos estados: Aguascalientes, Baja California, Campeche, Coahuila, Colima, Chihuahua, Durango, Guanajuato, Jalisco, Nuevo León, Puebla, Querétaro, San Luis Potosí, Sinaloa, Tamaulipas y Yucatán. Una verdadera vergüenza, pues el PVEM es un partido que da pena ajena, al igual que el Panal, ambos aliados del PRI en varias entidades federativas.

PRD: ¿liderazgos defecto?

Excélsior, p. 28/Primera: Nacional
Ruth Zabaleta Salgado
Si bien es cierto que en los últimos meses los cuestionamientos a los partidos políticos han sido constantes, debe quedar claro que un factor determinante lo son los medios de comunicación. Parecería que en México las primeras impresiones son las que quieren conducir el andar de la nación. Sucede así con los resultados preliminares que fueron difundidos a partir de la elección celebrada este domingo. Pocos medios impresos y electrónicos escaparon a la tentación de declarar “ganadores” y “perdedores”; otros olvidaron por completo que la agenda de los ciudadanos tenía como objetivo consolidar el rechazo al régimen y al sistema de partidos actuales y, de plano, la inseguridad fue poco atendida.

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