miércoles, mayo 06, 2009

Comentocracia: Doce días que cambiaron a México

Caricatura de Ahumada en La Jornada

Así viene la síntesis de artículos:

Doce días que cambiaron a México

Milenio Diario, p. pp-14/Política
José Narro Robles
Como en muchos otros momentos de la historia, nuevamente la enfermedad se ha ensañado con nuestra sociedad. Con la epidemia, la salud de muchos mexicanos se ha visto afectada. Decenas de ellos han perdido la vida y es imposible ignorar el grado de riesgo que estamos sufriendo. Somos millones los que en estos días hemos compartido una enorme preocupación por la magnitud y la potencialidad negativa de esta amenaza (…)

Que no estorbe

Reforma, p. 10/Primera - Opinión
Manuel J. Jaureguí
Dice una socorrida plegaria muy mexicana: “Diosito, no quiero que el Gobierno me ayude... ¡nomás que no me estorbe!”. Festejamos que el doctor Agustín Carstens, Secretario de Hacienda, haya anunciado un plan de apoyo económico de más o menos el equivalente a 27 mil millones de pesos (cerca de 2 mil millones de dólares) ante la secuela económica de esta contingencia. Aunque, debemos decir, ante tan alborotado panorama, se antoja limitada la ayuda, pues hay empresas mexicanas que han perdido esas cantidades ¡nada más en derivados! Además, se ha hablado de postergar y reducir el pago de cuotas al IMSS, pero no de cancelarlas, cuando esto último sería lo de más ayuda (…)

Lo que espera al turismo

El Universal, p. 18/Opinión
Francisco Madrid Flores
Es por demás evidente que una de las víctimas de la epidemia de influenza humana que hoy enfrentamos es el turismo mexicano. Ciertamente, en los años recientes el sector turístico, en México y en el mundo, ha estado a merced de distintos hechos naturales, económicos, políticos y sociales que le han impuesto extraordinarios desafíos de los que, podría decirse, ha salido razonablemente bien librado. (…)

Los extranjeros

Reforma, p. 11/Primera - Opinión
Sergio Aguayo Quezada
Empecemos a sistematizar lo acontecido durante la tempestad. Hoy discuto las novedades confirmadas en nuestra relación con los extranjeros. Afortunadamente, seguimos liberándonos de aquel victimismo que nos llevaba a sentirnos primero, y a rechazar después, cualquier crítica foránea, aunque fuera acertada. En esta ocasión las autoridades mexicanas y la Organización Mundial de la Salud se dijeron sus verdades sin que nadie sintiera que se jugaba el honor de la patria. Las majaderías de los gobiernos de Argentina, Cuba y China, entre otros, fueron bien respondidas por la Secretaría de Relaciones Exteriores, que se dedicó a proteger a los connacionales afectados por los malos modos o las oleadas de antimexicanismo.

Saldos del modelo al descubierto

La Jornada, p. 35/Opinión
Luis Linares Zapata
La indolencia de los tomadores de decisión, que corre al parejo de su escasa preparación, ha salido a relucir en la misma Secretaría de Salud (ver curricula del secretario y, sobre todo, de la subsecretaria recién nombrada) sin olvidar a los directivos del IMSS o del ISSSTE (¿qué pasó con el DIF?, por cierto). Todos estos elementos son productos señeros de la incapacidad del panismo para gobernar o de su partidista visión de grupúsculo. Desde el año 2000, la OMS emitió consejos e instrucciones para que se redoblaran esfuerzos en el sector ante pandemias por venir. El panismo los ha desoído y continuó con el desmantelamiento de laboratorios, empresas de antígenos y vacunas y confinó a los otrora eminentes centros de investigación a su mínima expresión, proceso que iniciara, por cierto, el priísmo neoliberal decadente. (…)

El encierro

Milenio Diario, p. 20/Opinión
Juan Ignacio Zavala
Hay familias cuyas comidas transcurren en silencio en medio de miradas gélidas, monosílabos y esfuerzos desmedidos por reprimir los impulsos de asesinato. Otras cuentan con personajes bulliciosos que tras sus carcajadas ocultan los odios, las envidias añejas; todo va muy bien hasta que una de las hermanas le lanza el tenedor al hermano burlón. Vale la pena recordar a Sartre y su obra A puerta cerrada, en la que nos deja ver que el infierno es un cuarto cerrado en el que se obliga a dialogar con el otro; también está la película de Luis Buñuel, El ángel exterminados en la que un grupo de amigos se queda encerrado y van perdiendo la compostura al pasar de los días hasta convertirse en salvajes. En una escena le dan de cepillazos a una de las mujeres. La convivencia, pues, tiene siempre sus bemoles.(…)

Virión homínido

Reforma, p. 11/Primera - Opinión
Froylán M. López Narváez
Han decrecido, en México, ansiedades y aún angustias, entre los habitantes del país, en cuanto se han divulgado nociones, datos, estadísticas, cálculos, de autoridades científicas y civiles, médicas y de investigadores, en torno al flamante virus A H1N1. Por las acciones cautelares para frenar la endemia, según conocimientos recientes. No así en los casos de deudos o de los infectados con ratificaciones clínicas, lo mismo que los damnificados socioeconómicos. A la par que los brotes virales han aparecido consideraciones y reconsideraciones sobre tópicos del alarmante mal. No han tenido difusión las ideas e informes sobre lo que se podría, se puede, clasificar de antropología filosófica: “razonar sobre el ser humano como mediador de su propia naturaleza”. A partir de, y más allá de su biología, lo que aquí uno propone como biosofía, es decir, pensar sobre destino, razón de ser, calidades y condiciones de femineidad y masculinidad, maneras de existir de la humanidad.

¿Politizada la influenza?

El Financiero, p. 27/Opinión
Luis Pazos
Politizar una carencia o desastre social es difundir datos y realizar acciones con el principal fin de obtener reconocimiento, simpatías o votos y no el de solucionar el problema.(…) En el caso de la influenza porcina, la opinión pública percibió inicialmente coordinación entre las autoridades de salubridad estatales, del DF y las federales, lo cual aplaude la mayoría de los ciudadanos. (…) Hasta ahora, la mayoría de las medidas preventivas tomadas en México en cuanto a la influenza porcina ha aminorado la expansión de esa pandemia; pero es importante que no se politice esa labor, que nadie la utilice para promoverse o para tratar de ganar votos. (…)

Estado y supervivencia

Reforma, p. 10/Primera - Opinión
Luis F. Aguilar
La epidemia padecida nos llevará seguramente a varias reflexiones de fondo sobre el modo de actuar del gobierno y de la sociedad en contingencias críticas y sobre las formas de coordinación que gobierno y sociedad pueden crear para prevenir y neutralizar situaciones de gravedad colectiva. Al análisis de lo ocurrido y a la necesidad de formular una agenda nacional de prevención y control de enfermedades y desastres debemos enfocar nuestra máxima atención, sin otorgar excesiva importancia a las tensiones que pudieron haber tenido lugar entre la OMS y nuestro sistema de salud, como tampoco otorgarla a las reacciones explicables pero alarmistas, precipitadas y discriminadoras contra ciudadanos mexicanos que han practicado algunos países latinoamericanos, europeos y particularmente la China autoritaria (…)

La hora de la restauración

El Universal, p. 19/Opinión
José Carreño Carlón
Ya el presidente Calderón anunció una campaña de promoción de México en el mundo, que requerirá identificar las audiencias realmente relevantes para nuestro país y elaborar mensajes con tal fuerza persuasiva que no puedan llegar a ser percibidos como falsos o como justificaciones de rutina. De acuerdo al método de Benoit, para atajar la tendencia a convertir a México en un pánico moral afuera y para mantener en el margen las descalificaciones internas, urge poner en marcha tres pasos discursivos esenciales: ofrecer todos los informes y explicaciones que condujeron a declarar la contingencia con base en datos no comprobados de casos y defunciones, lo que provocó alarma y rechazo afuera y dudas adentro; justificar lo justificable, lo excusable del manejo confuso de las primeras cifras, y ofrecer las disculpas por los efectos causados por ese manejo. Este es el piso de toda estrategia seria de preservación y restauración de imagen.(…)

Salud Pública: actuar ahora

El Universal, p. 18/Opinión
Andrés Lajous
En 1997 y en 2003 el gobierno de Hong Kong tuvo que reaccionar a sorpresivas epidemias de virus poco comunes. Hoy la isla está más preparada que cualquier país para detectar y controlar cualquier brote. Un ejemplo más ilustrativo es el de la epidemia de tifoidea que golpeó a las tropas de EU en la guerra con España en 1898. (…) Aunque fue una epidemia relativamente pequeña y concentrada, provocó que las fuerzas militares de EU pusieran atención al tema de salud pública y empezaron a hacer grandes inversiones en investigación científica a través de centros de investigación, hospitales, y medidas básicas de higiene, hasta entonces inexistentes, para reducir la posibilidad de que se desataran en el futuro. El Estado mexicano en sus tres niveles en décadas recientes ha concentrado sus esfuerzos en la protección de la propiedad privada de manera desigual frente a la protección de la salud. No hay mejor muestra de ello que la cantidad de recursos humanos y monetarios invertidos en el combate al crimen organizado acompañado de reformas legales con el mismo objetivo.


Sobre epidemia, sociedad y ética

El Universal, p. 19/Opinión
Ricardo Pascoe Pierce
Con el país entero atento a las indicaciones de la Secretaría de Salud para mejor afrontar el riesgo de una epidemia que aún pudiera sofocar muchas vidas, vienen a la mente otros acontecimientos que han sacudido igualmente a nuestra sociedad. El movimiento del 68 y en particular la masacre de Tlatelolco conmovieron hasta sus cimientos a la sociedad mexicana. A pesar de que ocurrió en el DF puso un signo de interrogación esencial al régimen político a nivel nacional, del cual éste nunca se libró. (…) En 1985 un temblor sacudió al DF, aunque tuvo efectos hasta Jalisco. Hubo una gran movilización social en la ciudad, llenando el vacío que dejó la conducta miedosa y vacilante del presidente y del regente. Ambos casos implicaron un enfrentamiento, literal o virtual, entre sociedad y Estado. También tuvieron como saldo que el Estado se vio obligado a transformarse democráticamente, aunque fuera a regañadientes. En la sociedad también se dieron cambios importantes


Aprender con virus

El Financiero, p. 26/Opinión
David Calderón
En términos generales, la emergencia ya pasó. La propagación del virus de la influenza A (H1N1) se ha detenido, y la pandemia como tal -entendida, con toda propiedad, como una epidemia con posibilidad de alcanzar a toda la población-, está descartada. Se descubrió -tardíamente, por la falta de un sistema sólido de vigilancia epidemiológica en el país- la incidencia de una influenza atípica de una severidad preocupante. Los médicos que sí estuvieron ante pacientes afectados de gravedad se azoraron ante el daño masivo a los pulmones, pues mientras una afección bacteriana deja todavía identificable la trama de los tejidos, este padecimiento produce en las horas finales unos boquetes en los que ya no se distingue la estructura original. El manejo, en términos de salud pública, fue tajante y de inusitada rigidez: desarticulación de las concentraciones, confinamiento global, aislamiento inmediato y sin flexibilidad para el contacto. (…)

Elecciones atípicas por la influenza

La Crónica de Hoy, p. Cuatro/Opinión
René Arce Islas
La ola expansiva de la epidemia de influenza generó la aplicación de diversas medidas en varios sectores y actividades para atender la alerta sanitaria (…) Ante la epidemia y el inicio formal de las campañas para la elección del próximo 5 de julio, el IFE acordó que los partidos políticos no realizaran ningún acto masivo (…) Hasta el momento todos los partidos políticos han respetado las reglas que el consejo de salubridad general dictó en relación con las medidas sanitarias de prevención. Sin embargo, como bien se sabe, los aspirantes a diputados y gobernantes en seis entidades tienen sólo dos meses para sus respectivas campañas (…) No sabemos cuándo va a terminar esta epidemia, pero lo que nos ha dejado es una gran oportunidad para que los políticos se acerquen a la ciudadanía, pues con las medidas de prevención sanitaria y con la cancelación de mítines y eventos públicos los candidatos que quieran ganar el voto de la gente tendrán que salir, no sólo a presentar sus propuestas, como lo hacen en los eventos masivos, sino que podrán escuchar directamente a sus futuros representados, por lo que ahora sí lograrán establecer un diálogo y no un monólogo, por ello decimos que se está frente a una oportunidad (…)

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