El caso de Luis Téllez y sus grabaciones filtradas a los medios, es tema este día del análisis de varios columnistas, que abundan en la dimensión política del escándalo:
Ricardo Alemán escribe en su columna de El Universal:
El escándalo desatado en torno a Luis Téllez —más allá del circo mediático y de sus lagunas éticas— es un misil que pega por debajo de la línea de flotación del gobierno de Calderón y que exhibe sus debilidades.El artículo, AQUI
¿Qué significa que sin control alguno, y durante meses, copias de las escuchas pinchadas a Téllez rodaran por las alcantarillas mediáticas? ¿Qué debemos entender ante las públicas y desmedidas ambiciones de poder de una “amiga del presidente” como Purificación Carpinteyro, quien peleaba por el premio mayor de la SCT?
¿Cómo explicar la jauja del espionaje telefónico a lo más altos niveles, y que autoridades, medios y sociedad se sorprendan por las revelaciones, antes que cuestionar la forma en que se obtienen y difunden? ¿Qué entender del silencio de Calderón —frente al escándalo que no apoya y tampoco a Téllez—, y que todo el gobierno parece haber dejado solo al titular de SCT...?
Está claro que más de una mano movió y mueve la cuna mediática que intentó —y acaso consiga— tirar a Téllez de la SCT. No existen dudas de que detrás de esa andanada mediática aparecen lo mismo televisoras, que frecuencias radiales y poderosas telefónicas.
No es un secreto para nadie que Téllez metió a la lumbre más “fierros” de los que pudo manejar, y que en la guerra de las telecomunicaciones todo, o casi todo se vale. Toda batalla de y por el poder es a muerte.
Por su parte, Joaquín López Dóriga releva en su columna de Milenio, que ya había oído hablar de la famosa grabación:
Martín Moreno, en su espacio de Excélsior, Archivos del poder se pregunta:
La columna, AQUI
Salvador García Soto, en Serpientes y Escaleras, de El Universal, apunta:
Y Leopoldo Mendívil en La Crónica le dice al titular de la SCT:
Además:
Carpinteyro tenía las grabaciones de Téllez
Diana Pando ¿profesional de la extorsión?
Alguna vez Luis Téllez había comentado que estaba siendo presionado por una mujer que decía tener la grabación de una conversación que lo comprometía.La columna, AQUI
Pero no le di importancia. Desde un espacio estrictamente profesional, no le di peso periodístico a lo que parecía ser un asunto estrictamente del ámbito de su intimidad.
La semana pasada, cuando Carmen Aristegui, en su nuevo espacio informativo de MVS, dio a conocer la grabación que se atribuyó a Diana Pando y un recado captado en forma accidental a miles de kilómetros en un sorprendente buzón de voz celular con capacidad de 16 minutos, recordé el caso.
Entonces recordé, también, la estrechísima y añeja relación de amistad y estrechísima cercanía con un doble compadrazgo entre Téllez y el presidente de MVS, Joaquín Vargas, quien desde la presentación de la periodista en sus filas, reclamó la inacción del gobierno, léase SCT-Felipe Calderón, para refrendarle sus concesiones hoy invaluables con la nueva generación, aunque hay quienes las han cotizado en tres mil millones de dólares a precio de mercado.
Pero no le encontré otra conexión.
Martín Moreno, en su espacio de Excélsior, Archivos del poder se pregunta:
¿Y qué va a pasar con Luis Téllez? Calderón debe pensar muy bien qué tanto le sirve un secretario de Comunicaciones a quien ya todos ven con desconfianza, sin ética y, lo más grave, dispuesto a utilizar la figura presidencial para asuntos personales. Está anulado.
La columna, AQUI
Salvador García Soto, en Serpientes y Escaleras, de El Universal, apunta:
De “problema personal” califican en Los Pinos el affaire Téllez, y aunque el Presidente no saldrá públicamente a dar un respaldo al funcionario sumido en el escándalo, el apoyo de Calderón para su secretario de Comunicaciones se mantiene intacto. Lo único que le pidieron a Luis Téllez Kuenzler es que “salga él a arreglar la parte personal” del tema y, por lo demás, afirman, “no hay problema” con el titular de la SCT.La columna, AQUI
La conferencia que ayer por la tarde salió a dar el secretario fue parte de la instrucción que le dieron en Los Pinos para que atendiera el tema personal del escándalo, aunque sobre el resto de las conversaciones telefónicas de Téllez, en las que exhibe su pleito con los comisionados de la Cofetel, negocia el uso del nombre del Presidente o incluso dice “extrañar al PRI”, no hubo comentarios.
Fiel a su costumbre, el presidente Calderón parece haber decidido mantener a Luis Téllez en su cargo contra viento y marea. Aun cuando el secretario de Comunicaciones ha quedado francamente expuesto en su credibilidad pública —culpa a Salinas de un robo millonario y luego dice no tener “elementos”, o niega conocer a una ex amante— y ha entrado en conflicto también con algunos actores importantes del sector telecomunicaciones.
El problema para Calderón no será sostener a Téllez ante los embates de grabaciones y filtraciones que pueden provenir de un declarado y “catastrofista” enemigo; el Presidente puede verse en apuros si, como empieza a haber señales, otros jugadores de primer nivel de la industria de las telecomunicaciones deciden sumarse a la embestida contra el titular de la SCT.
Y Leopoldo Mendívil en La Crónica le dice al titular de la SCT:
Fue durante su gestión como jefe de la oficina de la Presidencia de Zedillo cuando se fraguó la andanada contra Carlos Salinas, incluido el rumor de la presunta malversación de la partida secreta que él operó. Y si usted ocupaba tan estratégico cargo, es poco creíble que desconociera la especie cuando todos la escuchábamos saliendo de Los Pinos y quedaba claro que su entonces jefe Zedillo comandaba la propaganda negra contra su antecesor.La columna, AQUI
Y ahora tenemos que quién sabe cómo se grabó en 2005 una conversación suya con alguien en el celular de otra persona, sobre algo sucedido 10 años atrás sobre la mitad de la partida secreta que Salinas de Gortari se habría embuchacado... Pero ahora usted dice que sí lo dijo pero sin evidencia probatoria alguna.Lo bueno es que a Zedillo estas pequeñeces le tienen sin cuidado, pues para él lo importante es que derrumbó la imagen pública de su antecesor. Lo demás es, para él, francamente lo de menos.
¿Pero no será que sufre usted cierta tendencia a afirmar cosas de las que no tiene evidencia..?
Además:
Carpinteyro tenía las grabaciones de Téllez
Diana Pando ¿profesional de la extorsión?
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