domingo, junio 07, 2009

Comentocracia: Los del voto nulo, con la cabeza gacha

Caricatura de Hernández en La Jornada

Así viene la síntesis de medios:

Sobre el voto nulo

Milenio Diario, p. 14/Opinión
Juan Ignacio Zavala
Cuando salieron a la luz las primeras impresiones sobre el llamado “voto en blanco” o “voto nulo” parecían acciones encabezadas por quienes invitaban a dejar de participar en la vida cívica porque si no gana el que ellos piensan que es el bueno, de nada sirve la participación. Coincido con quienes creen que varios de los promotores de la idea lo hacen porque les daría pena confesar que votaron por el PT. La distancia que en su radicalismo ha puesto a López Obrador lejano a una gran cantidad de sufragantes en 2006, los tiene con la cabeza gacha, el ánimo por los suelos y el pensamiento en una suerte de anarquía posible.
Detrás del voto

El Universal, p. 22/Opinión
Francisco Valdés Ugalde
La pregunta entonces no es votar o no votar por “más de lo mismo”, sino saber cómo canalizar el hartazgo para cambiar la oferta política. Por desgracia, no hay una relación directa entre votar, no votar o anular el voto y conseguir que cambie dicha oferta. Ciertamente, el sistema político podría conmoverse si una inmensa mayoría de los electores decidiera no concurrir a las urnas. La abstención masiva puede ser un llamado grave de atención a una clase política que la opinión pública considera poco o nada representativa y muy ineficiente y corrupta. Aunque puede preverse un abstencionismo considerable, como ocurre regularmente en elecciones intermedias, no es probable un escenario en que la mayoría deje de ejercer el sufragio.


IFE y TEPJF, una relación de ley

El Universal, p. 22/Opinión
Leonardo Valdés Zurita
Desde hace más de 30 años, las particularidades y el alcance del sistema electoral mexicano se han construido a través de la reflexión y los consensos, generados alrededor de instituciones mucho más incluyentes y eficientes. Aunque el Instituto Federal Electoral (IFE) y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) han tenido desarrollos distintos, el andamiaje normativo e institucional que representan ofrece actualmente legalidad y certeza a la organización de las elecciones y a la resolución de controversias de carácter jurisdiccional.

Universidad pública y universidad privada

El Universal, p. 22/Opinión
Sara Sefchovích
Cuando el presidente Calderón nombró como secretario de Educación Pública a Alonso Lujambio, se puso sobre la mesa una cuestión que hace rato viene dividiendo a la sociedad mexicana: si los funcionarios son mejores cuando han egresado de universidades públicas o de instituciones privadas. Hasta el último sexenio del siglo XX, la universidad pública fue la piedra sobre la que se fundaba la carrera de los políticos y funcionarios. La razón de esto era en parte por el prestigio de instituciones como la UNAM. El proceso se acompañó con otro concomitante que consistió en devaluar de manera consciente y decidida a la universidad pública, el hecho es que tanto en el gobierno como en las empresas se empezó a considerar que ser egresado de la UNAM no servía y que serlo de la Ibero, del ITAM, de La Salle, del Tec o de la Libre de Derecho era lo mejor.

Usted no tiene la razón

El Universal, p. 23/Opinión
Alejandro Páez Várela
Los partidos pueden recurrir a la mentira para generarse votos. Pueden envilecer la política con guerras de lodo. Se han ganado con su eficiencia cada centavo que se gastan (en un país con 40 millones de pobres y en plena crisis) en balbucear su arrogancia y precariedad en la tele, la radio, las calles o los impresos. El PAN, el PRI y el PRD tienen la razón. Los partidos enanos tienen la razón. El Partido Verde es verde, por supuesto. Acción Nacional es responsable, el Revolucionario Institucional es una garantía porque sabe gobernar, y con el de la Revolución Democrática sí gana la gente. Nadie lo dude. Los mentirosos, irresponsables, inútiles, incumplidos y corruptos somos los ciudadanos, y nadie más. Los partidos y los gobiernos que de ellos emanan no son responsables por el desánimo nacional: somos los ciudadanos.

Aquí y en China

Reforma, p. 12/Primera - Opinión
Isabel Turrent
El intento del IFE de aplicar la reforma al artículo 41 constitucional, que en aras de una supuesta equidad prohíbe a los particulares hacer propaganda política en radio y televisión y a los partidos hacer campaña atacando a candidatos de otros partidos, ha sido un fracaso anunciado. La reforma viola las libertades individuales consagradas en otros artículos de la Constitución y la igualdad política que en toda democracia implica abrir canales de expresión para todos -no cerrarlos. Pero lo que el IFE debería haber aprendido en estos meses es que la censura es, aquí y en China, costosa e ineficaz. Costosa porque obliga al Gran Inquisidor en tumo a dedicar recursos cada vez mayores para financiar ejércitos de censores dedicados a leer hasta los renglones más escondidos de libros y periódicos, ver o escuchar todos los programas posibles de televisión y radio, y navegar noche y día por el Internet.

El Proyecto 279

Reforma, p. 12/Primera - Opinión
Jorge Ramos Ávalos
Hay fuertes señales de vida. La reforma migratoria no está muerta. La semana pasada se reunieron en Washington más de 700 congresistas y líderes de organizaciones civiles, iglesias, sindicatos y empresas para lanzar una campaña a nivel nacional que permita la legalización de millones de indocumentados. Y el próximo miércoles 17 de junio, en la Casa Blanca, el presidente Barack Obama se reunirá con un pequeño grupo de republicanos y demócratas para planear los pasos concretos que culminen con una reforma migratoria este año.


Votar o no votar

Reforma, p. 13/Primera - Opinión
Luis Rubio
Para Hamlet el dilema giraba en torno a asumir el reinado con toda la violencia que vengar la muerte de su padre habría implicado. Para el votante mexicano el dilema es menos dramático pero a la vez más fundamental: cómo usar su voto de la manera más inteligente posible. El debate sobre el voto está en apogeo, pero el riesgo de anular el voto es infinitamente superior al beneficio. Empleando argumentos serios y respetables, muchos estudiosos y comentaristas han abogado por la abstención o por la anulación del voto en la próxima elección. Normalmente, el dilema de un votante es por quién votar -persona o partido- y no el de si acudir a las urnas o cómo cancelar su voto una vez en la casilla. (…)

Los niños de Sonora

Milenio Diario, p. 15/Opinión
Jorge Medina Viedas
La muerte de más de treinta niños en el incendio ocurrido en Hermosillo, Sonora, es la muestra más dramática de la incuria y la corrupción que asedia a todos los niveles de la sociedad mexicana. Es una vergüenza que nos tengamos que preguntar quién, por qué el Instituto Mexicano del Seguro Social autorizó la concesión de esa guardería, y no tuvo el cuidado de exigir y vigilar el cumplimiento de las reglas de seguridad que exige cualquier sistema de protección civil en instalaciones de esta naturaleza. Ayer fue el descuido de un colectivo local que involucra al concesionario privado de la guardería, a las autoridades del IMSS, a las autoridades locales y a unos seres anónimos que, como los mencionados, en la vida cotidiana dejaron de hacer su labor.

México: elecciones, voto nulo y legitimidad

Milenio Diario, p. 12/Opinión
Alan Arias Marín
La probabilidad de que masivamente los ciudadanos anulen su voto deliberadamente en los próximos comicios ha desatado un escándalo mediático y político. La sociedad política reacciona indignada, ellos -gobierno en sus tres ramas, funcionariado, instituciones electorales, partidos y legisladores- así como los voceros de los negocios conexos y simbióticos con el sistema de partidos -las empresas de comunicación de masas, principalmente, electrónicas (pese a su disgusto con la reforma electoral reciente)-, se convierten en súbitas guías de la moral política. Así, predican proféticos la buena conducta ciudadana y cívica y alertan, avispados y profundos, sobre las nefandas consecuencias de tan incivil comportamiento.


¿El siguiente capítulo en las “estancias” changarro de Calderón?

La Jornada, p. p/4/Política
Gustavo Leal F.*
En el sur de Hermosillo, Sonora, 38 bebés muertos, y 40 infantes y seis adultos hospitalizados. La guardería ABC -subrogada por el IMSS- operaba “habilitada” en una antigua nave industrial, al lado de una bodega, en un espacio de 50 por 30 metros que apenas hace tres años era una maquiladora de ropa. No tenía salidas de emergencia. No contaba con extintores. Su personal eran empleadas o maestras. Atendía a más de 200 menores de entre seis meses y cinco años; 142 estaban dentro a las 15 horas de ese 5 de junio. La peor tragedia de que se tenga registro.

Las horas de la angustia

La Jornada, p. 19/Opinión
Rolando Cordera Campos
Mientras el gobierno y Calderón recorren el país con el “traidor” o la “traición” en la boca, derruyendo a su paso el pacto federal que quedaba, los embates de la crisis global avasallan contingentes y regiones enteras. No es la seguridad o la criminalidad organizada la que ha puesto contra la pared de la penuria a la mayoría de la población nacional, sino una economía exánime que carece de los mecanismos más elementales para reaccionar, evitar que el daño productivo sea cada vez mayor y proteger en la medida de lo posible a los más débiles y vulnerables de la sociedad. Ahí anida el huevo de la serpiente que luego se despliega en la opción de muchos jóvenes por la huida territorial a través de la emigración, o por la fuga moral que se plasma en su incorporación a las filas de la rebelión delincuencial, que en efecto no deja intacta parte alguna de la geografía mexicana. (…)

¿El PRD es la izquierda?

Excélsior, p. 15/Primera-Opinión
René Avilés Fabila
Si alguien en la historia nacional ha presumido ser de izquierda es justamente el PRD. Las verdaderas organizaciones de izquierda como el Partido Comunista, un recuerdo borroso, no solían desgañitarse calificándose en tal tesitura. Trabajaban, quizá no muy bien (recordemos el análisis crítico de José Revueltas, Ensayo sobre un proletariado sin cabeza), sin necesidad de aferrarse a un adjetivo. Con tareas concretas intentaron crear un país distinto, opuesto al modelo que concebía el PRI y al que proponía el PAN, de corte más conservador. (…)

La discreción será el arma para dar resultados

Excélsior, p. 1/Comunidad
Federico Döring
Hace unos días, en la reunión del Consejo Nacional de Seguridad Pública, se pudo notar cómo el ego de algunos gobernadores estaba siendo maltratado, no podía creer que a Leonel Godoy le preocupaba más su imagen ante la opinión pública por el operativo limpieza que la seguridad de su estado. Ese día estaba que ni el sol lo calentaba, pues era demostrado que en Michoacán el crimen organizado era el que mandaba en aquel territorio. Destaca que uno de los enormes fracasos para detener a los delincuentes resulta ser la fuga de información y ha quedado demostrado que a los gobiernos perredistas se les da muy seguido.

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