jueves, febrero 02, 2017

Evidente incomodidad entre Ricardo Anaya y Marta Erika; el mensaje: iríamos a la disidencia

Fermín Alejandro García en su columna Cuitlatlán, de La Jornada de Oriente, relata que quienes estuvieron cerca dicen que durante la unción de Antonio Gali Fayad como nuevo gobernador de Puebla hubo una atmosfera de tensión, de incomodidad, entre el líder nacional del PAN, Ricardo Anaya Cortés, y Martha Erika Alonso, quienes estuvieron sentados juntos durante el acto protocolario. 
Y es que el ambiente, o mejor dicho el diseño del acto estuvo de tal manera que Rafael Moreno Valle Rosas mandó el mensaje a la cúpula panista nacional de que puede armar una importante disidencia política contra el albiazul si no le dan condiciones para competir por la candidatura presidencial.


El meollo del asunto

El mensaje entre líneas que Moreno Valle le habría mandado a Anaya es que hay por lo menos cuatro partidos, un bloque de políticos salinistas, de panistas inconformes y de gobernadores priistas, del PVEM y del PRD que podrían apoyarlo para ser candidato presidencial fuera del PAN, mediante una coalición de fuerzas plurales, en caso de que la dirigencia panista soslaye su capital político.
Moreno Valle ayer, tal como se preveía, rompió las reglas protocolarias, de urbanidad política y en lugar de ubicarse como un invitado más en la ceremonia de rendición de protesta de Gali Fayad, se colocó en el presídium, a un costado del presiente del Tribunal Superior de Justicia, Roberto Flores Toledano, a quien parecía darle órdenes. 
Con ello quiso dejar en claro que sigue influyendo –por lo menos hasta ayer– en el desarrollo de la política local y en la manera en que se desarrolló dicho acto.

Aquí la columna

++++++
SUSCRÍBETE gratis al Boletín de la Hora Cósmica. Recibirás de lunes a viernes a primera hora la información más destacada. PICA AQUÏ
++++++

No hay comentarios.:

Publicar un comentario