Jodidita y madreadita, Ana Tere confiesa que está hasta la madre

La Hora Cósmica

Por Cosme Haces

Habría que ver el nuevo video de Ana Teresa Aranda para constatar hasta dónde puede llegar la determinación de una mujer decidida a conquistar una meta a toda costa.

Con seis costillas rotas, como ella se describe, un hombro y un dedo fracturados, un golpe en la frente que no disimula bien el maquillaje, en silla de ruedas y para acabarla de amolar, con una afeccion pulmonar, consecuencias del accidente que sufrió hace unas semanas, aparece una mujer, que ya rebasa los 60 años, anunciando que sigue adelante, dispuesta a cobrarle todas juntas a un gobernador prepotente y abusón.
"Así, jodidita y madreada, desde mi Facebook, voy a darle hasta topar con pared, cueste lo que cueste".
Estoy hasta la madre, confiesa.
Pero aclara que hasta la madre y encabritada, porque llegó al límite, igual que los poblanos, de aguantar tanta sinvergüenzada, tanto descaro, tanto cinismo, tanta prepotencia y tanto autoritarismo.
Lo dice Ana Tere, pero lo avalan también los observadores.

Golpe de estado

Este mismo día, en Intolerancia, Enrique Núñez hace un recuento de lo que considera aberrantes decisiones que confirman un golpe de estado fáctico en Puebla, toda vez que Moreno Valle aseguraría el control del poder judicial, del poder legislativo, de la Fiscalía General y de la Auditoría del estado.
"Es decir, que con estas medidas tiene asegurada su libertad y la de sus cómplices gane quien gane", afirma el columnista.
No es de extrañar, pues, que proliferen las candidaturas independientes, para revertir este estado de cosas.
Lo curioso es que en estos momentos, de la media docena de aspirantes a gobernador que han surgido, los que tienen más posibilidades, sean una mujer madreada, Ana Teresa, y un octogenario, Ricardo Villa Escalera, pese a que aún tenga el empuje de un tsunami, como lo describió La Hora Cósmica en columnas anteriores.
El contraste es abismal con los candidatos de los dos grandes partidos a los que deberán  enfrentarse en la contienda electoral que viene.

El calvario de las firmas

Blanca Alcalá, por ejemplo, parte de un escenario privilegiado: el Senado de la República al que acaba de renunciar para lanzar su precampaña el domingo, respaldada por los gallones nacionales de su partido y los más destacados priístas locales en un evento que tendrá todo el espectacular despliegue que acostumbra el PRI.
Antonio Gali, por el estilo: arranca también desde la tribuna de su informe de gobierno que tuvo una amplísima cobertura informativa y publicitaria y desde la evidencia de que contará con toda la fuerza política del gobernador.
Los independientes, en cambio, están empezando el calvario de conseguir las firmas necesarias para registrarse.
Dame tu firma, clama Ana Tere en su video.
Los vamos a poner como camote, promete.
Su éxito dependerá de que la debilidad manifiesta en su silla de ruedas, se convierta en su fortaleza.
De que los poblanos le respondan.
Si es que de verdad están hasta la madre.

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