jueves, abril 07, 2005

Llegó el dia del juicio


El día en que se decidirá el desafuero de Andrés Manuel López Obrador, encuentra a un México dividido.
Mientras unos, como el caricaturista Helioflores, en El Universal, insisten en hacer del gobernante del Distrito Federal una víctima, muchos otros hacen votos porque México salga de este problema en paz, según refleja en Reforma el cartón de Calderón, aquí abajo

Por cierto que ahí en Reforma, F. Bartolomé pronostica un dia histórico, histérico e histriónico.
HISTÓRICO porque será la primera vez que un jefe de Gobierno sea sometido a un juicio de desafuero; un hecho que tiene dividida a la sociedad mexicana.

HISTÉRICO porque el nerviosismo de las autoridades capitalinas y federales ya se contagió a los mercados financieros, que no resultaron tan ecuánimes como se decía.

HISTRIÓNICO porque primero en el Zócalo y después en San Lázaro, el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador hará gala de sus dotes para el circo político de tres pistas.

SE LE VERÁ realizar piruetas de trapecio en los dos discursos que hoy pronunciará. El reto será equilibrar hígado y sesos.

EN EL PRIMER discurso la tiene fácil: una muchedumbre de empleados, seguidores, beneficiarios de sus programas sociales y acarreados.

CON ELLOS se dará gusto ofreciendo un discurso incendiario, cargado de adjetivos y descalificaciones, recordándole a sus desmañanados aplaudidores que él es el Rayo de Esperanza, y en el que no dejará títere con cabeza al nombrar a los innombrables detrás del "compló".

EN EL SEGUNDO tendrá que ser más cuidadoso. No es lo mismo la Cámara de Diputados que la porra perredista.

SIN METERSE al fondo del asunto -el problema legal-, en San Lázaro López Obrador se centrará en los argumentos políticos para rechazar el desafuero.

Y EN LUGAR de citar leyes, se remontará a Madero y Juárez para equipararse con ellos.

QUIZÁ haya que esperar a que López Obrador esté ante el juez, para conocer si realmente tiene algo qué decir en el terreno de la legalidad.