miércoles, febrero 08, 2006

Es duro ser amado por los gilipollas


Pues nada, que no dejan en paz a Mahoma.
Ahora, y según consignan las agencias, es una revista francesa la que insiste en caricaturizar al profeta:
«Por solidaridad y por principio», el semanario satírico Charlie Hebdo publicó el miércoles una serie de caricaturas de Mahoma, entre ellas las doce divulgadas en septiembre por el diario danés Jyllands-Posten que han sido las causantes de la polémica.

Diversas organizaciones musulmanas intentaron en vano impedir la reproducción de estas viñetas, pero la justicia francesa desestimó los recursos presentados por estas entidades, entre ellas el Consejo Francés de Culto Musulmán. Según los magistrados, atender sus demandas habría significado atentar contra la ley de la prensa de 1881.

Charlie Hebdo sale a la venta los miércoles con un total de 100.000 ejemplares. Esta semana aumentó su tirada hasta 160.000 y la edición se agotó en pocas horas, lo cual animó a sus responsables a publicar otros 160.000 ejemplares inmediatamente.

«Charlie Hebdo intenta analizar la polémica y sus consecuencias. Queremos mostrar que la libertad de expresión debe ser más fuerte que la intimidación», publica el semanario.

En su primera página, el diario titula «Mahoma abrumado por los integristas» y ilustra el artículo con una caricatura del profeta que se echa las manos a la cabeza mientras dice: «Es difícil ser amado por idiotas».

Acto seguido, la publicación reproduce las 12 polémicas caricaturas, entre ellas la de Mahoma con una bomba en un lugar de un turbante, y otras diferentes realizadas por los ilustradores de la revista, que representan al profeta musulmán pero también a símbolos de otras religiones.

«No tenemos la intención de ofender a nadie y respetamos enormemente a los musulmanes, pero también creemos que la libertad de expresión debe defenderse y por eso publicamos las caricaturas», declararon a la prensa responsables del semanario.

En tanto, el presidente francés Jacques Chirac acusa a los editores de atizar inútilmente las pasiones.

Y el presidente George Bush pide a los gobiernos que pongan fin a la violencia desatada por las caricaturas.