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Transparencia y Sociedad
Transparencia y Sociedad
20-09-17 Un servicio de La Hora Cósmica
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La desconfianza de la gente hacia el manejo por parte del gobierno de la ayuda que la sociedad recaba para socorrer a los damnificados por los sismos, cunde tras supuestos manejos con fines políticos de esos recursos.
El caso más sonado es el de Morelos, donde, según denuncias, El DIF, que encabeza la esposa del gobernador Graco Ramírez, acapara la ayuda en sus bodegas.
El temor de la sociedad es que esda ayuda que procede de los ciudadanos sea repartida, pero etiquetada por el gobierno estatal.
El temor es también manifiesto en Puebla, donde el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa de plano instó a la ciudadanía a canalizar sus aportaciones para los damnificados a través de las instituciones de la Iglesia Católica.
Según consignan medios poblanos, los ciudadanos desconfían de entregar lo que recolectan a las autoridades, pues temen que los artículos sean utilizados con un fin político, por lo que mensajes preguntando a qué persona se le pueden entregar, que sea confiable, inundan las redes sociales.
Mientras tanto, comienzan a surgir los casos que demuestran que parte de la tragedia de la pérdida de vidas humanas en edificios colapsados, es fruto de la corrupción.
Según análisis del portal Sin Embargo, ningún edificio construido después de 1985 debió haber sufrido daños mayores si se hubiese construido conforme a las reglas vigentes.
Al menos 47 de los edificios caídos o con daños estructurales severos son fruto de la corrupción, sea porque quedaron dañados desde 85 y se autorizó su restauración sin cumplir las normas, sea porque se construyeron fuera de reglamento.
