lunes, septiembre 11, 2006

Los periodistas buenos

Federico Arreola, funcionario en el equipo de Andrés Manuel López Obrador, da a conocer este día en Milenio la lista de los periodistas aprobados por el ex candidato presidencial:

Ayer, en el Zócalo, Andrés Manuel López Obrador habló de algunos medios de comunicación que están cerca del pueblo y distantes del poder: La Jornada, radio Monitor, que todas las noches transmite sin que se le paguen las asambleas de la coalición Por el Bien de Todos. Mencionó también a Ricardo Rocha, Carmen Aristegui, Jorge Saldaña, Proceso y Radio UNAM. No son los únicos periodistas alejados del poder. Hay otros, como Marcela Gómez Zalce, Lorenzo Meyer, Jairo Calixto Albarrán, Guadalupe Loaeza, Epigmenio Ibarra, Jacobo Zabludovsky


Este día también Pablo Hiriart recuerda en La Crónica, cuando los periodistas le ponían la alfombra roja al Peje, con entrevistas y notas a modo:
¿El que dice que los medios de comunicación no le han brindado espacios, que lo han cercado y jugaron a favor de Calderón, es el mismo que salía todas las mañanas en televisión, con entrevistas de una hora en el medio electrónico que él quisiera?
Sí, es el mismo.
Es el mismo que recibió un trato privilegiado en la televisión y en la prensa.
Es el mismo al que le tapaban sus errores porque no querían enemistarse con él.
Es el mismo que a los medios electrónicos les pagó
—con dinero público— hasta anuncios que nunca salieron al aire, como lo documentó Crónica.
Es el mismo que apareció durante casi cinco años en spots para promover su imagen personal.
Es el mismo que con dinero público pagó cinco años de anuncios en televisión, donde aparecía con el pulgar hacia arriba, sonriente, con frases de campaña.
¿Ya se nos olvidó?
En el futbol, en Big Brother, en las telenovelas, en los noticiarios, hasta en la sopa salía López Obrador.
Su caja chica no tenía fondo. Era el presupuesto del DF, disfrazado en fideicomisos que nunca rindieron cuentas.
Una legión apabullante de conductores de radio y televisión estaba con él, y no todos por afinidad ideológica.
Las entrevistas con él eran, generalmente, de alfombra roja y caravana para el entrevistado.
Desde el gobierno capitalino quiso amedrentar a periodistas y medios de comunicación que ejercían su función crítica.


Sobre el asunto de los medios, Ricardo Alemán hace un balance en su columna Itinerario Político, para concluir que también aquí hubo damnificados tras la campaña electoral:
En el terreno mediático también son muchos los damnificados. En el caso de Televisa y Televisión Azteca, se puede hablar de una victoria -porque mantuvieron encendidas sus veladoras ante los tres principales altares-, pero fue claro que Azteca le apostó al candidato de la coalición y que Televisa lo hizo a favor del que resultó ganador. En el caso de la radio, también hubo damnificados. Los informativos Monitor-MVS, de José Gutiérrez Vivó, y Detrás de la Noticia, de Ricardo Rocha, mostraron una preferencia notoria por una de las causas, a riesgo de convertirse en propagandistas.

Y en donde de plano el papel de la información cedió terreno de manera abierta a la propaganda a favor de una de las causas, fue en los diarios La Jornada y La Crónica, y en el semanario Proceso. La Jornada y Proceso vivieron un claro conflicto de intereses -ser parte de una de las propuestas electorales, la de la coalición, y cumplir con su causa de origen, la de informar-, en tanto que La Crónica tuvo el cuidado de declararse, en un editorial de primera plana, y desde mucho antes de la etapa electoral formal, como un diario crítico al caudillo. Esa fue la diferencia, sutil para algunos, pero fundamental en una guerra mediática como la que terminaron por escenificar los pretensos al poder presidencial.

Entre conductores de informativos, columnistas y articulistas hubo de todo: quienes preferían a los amarillos, a los azules o a los tricolores. Pero al final de cuentas para la mayoría de electores no quedó claro el principio del género de opinión, de crítica, que no es el mismo que el de noticia, crónica o reportaje. También aquí hubo damnificados.

Gabinetología razonada

Los gabinetólogos continúan este lunes engordando la lista de candidatos a integrar el gabinete de Vicente Calderón.
Milenio adelanta en sus trascendidos una terna para la Secretaría de Seguridad Pública:
Que los tres nombres que encabezan hoy los pronósticos para ocupar la Secretaría de Seguridad Pública son los del gobernador de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña, el asesor de cabecera de Calderón, Germán Martínez, y el secretario particular del presidente Fox, Emilio Goicoechea.


Pero nuevamente es la secretaría de Hacienda la que se lleva las palmas en cuestión de pronósticos.
Ahora es Luis Soto quien dedica prácticamente toda su columna Agenda Confidencial para dar un adelanto en El Financiero, eso sí, muy razonado:

En el caso de la Secretaría de Hacienda, y a decir de colaboradores cercanos a Calderón, sólo tres personajes que han pasado por esa dependencia están siendo considerados para Hacienda: Agustín Cartens, Tomás Ruiz y Santiago Levy, pero no precisamente en ese orden.

Cartens, economista del ITAM con estudios de doctorado en la Universidad de Chicago, es sin duda el delfín de Francisco Gil Díaz y el garante para éste de que en Hacienda se dará continuidad no sólo a las políticas, sino al sello personal de Paco. Vinculados desde su época del Banco de México, Gil ha sido maestro y mentor de Cartens, quien siguió los pasos de aquél por la Universidad de Chicago, reconocida como la cuna de la ortodoxia monetarista en el mundo. Cartens ocupó la subsecretaría del ramo por tres años con Gil, siendo ésa toda su experiencia en la Secretaría de Hacienda, pero su anterior paso por el banco central, en el que trabajó por más de 15 años, respalda su solidez técnica. Además de Gil, Cartens cuenta con el apoyo de la comunidad financiera, tanto en México como en el ámbito internacional, pues hoy ocupa la cartera número dos en el Fondo Monetario Internacional. Su especialidad como economista es precisamente en temas financieros y de deuda, áreas en las que destacó en el Banco de México. El único inconveniente es que sería la "tapadera" de Paco, apuntan los malosos.

Tomás Ruiz es de los tres aspirantes el que rompe el molde de la ortodoxia para un posible secretario de Hacienda, pues no es economista, sino abogado, egresado de la Escuela Libre de Derecho, aunque con maestría en economía por la Universidad de Columbia en Nueva York.
Ruiz inició también su carrera en el Banco de México, pero su trayectoria en Hacienda fue de diez años ocupando posiciones de primer nivel: director general de Banca, procurador fiscal, subsecretario de Ingresos y presidente del SAT. De hecho durante su etapa como subsecretario se creó el SAT.
No pertenece al grupo de Gil, sino más bien es uno de los delfines de Guillermo Ortiz, quien es su amigo y fue su jefe en Hacienda. Ruiz es de los tres el que más se ha acercado a un perfil de político; fue diputado y encabezó los esfuerzos por aprobar reformas estructurales en la pasada legislatura. Tomás tiene buena reputación entre los grupos empresariales, pues se le reconoce como un administrador eficaz.

Santiago Levy es también economista con doctorado por la Universidad de Boston; también cercano a Guillermo Ortiz con quien colaboró como subsecretario de Egresos cuando Ortiz fue secretario de Hacienda. Antes de Hacienda, Levy fue presidente de la Comisión de Competencia, tema que junto con los de pobreza han sido su especialidad como economista. Ha realizado diversos trabajos para el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial. En esta administración Levy encabezó en el IMSS los esfuerzos por corregir la difícil situación financiera de ese organismo, pero sus diferencias con Francisco Gil y su confrontación con el secretario de Gobernación y el sindicato del Seguro Social, lo llevaron a renunciar de manera un tanto inesperada a esa institución.

Para que la "terna sea de cuatro" falta uno, y por eso se incluye a Luis Téllez, quien es el único de los mencionados que no ha pasado por Hacienda. Tal vez por ello, hay quienes lo candidatean también para Relaciones Exteriores.


Otro que desde temprano se dió a especular fue Nino Canún que aventuró lo siguiente en su noticiero ¿Y usted qué opina?

De acuerdo con el gabinetazo que se está conformando por parte de Felipe Calderón todo mundo está observando que no haya gente puesta o impuesta por la señora Marta o que tenga alguna relación con la señora Marta.

Se habla de que en la Secretaría de Gobernación estaría precisamente Josefina Vázquez Mota; en Relaciones Exteriores no se han decidido pero parece que todo apunta a Arturo Sarukhán; en la Procuraduría General de la República, Rogelio Carbajal, bueno, una de las personas más allegadas al propio Felipe Calderón.

También se habla en el sentido de que en la Secretaría de Seguridad Pública tendría que ser alguien ajeno a la señora Marta, quien más que el gobernador del estado de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña.

En la Secretaría de Hacienda y Crédito Público Agustín Carstens es el hombre ideal para que realmente tenga una estrecha relación con Felipe Calderón.

En la Secretaría de Energía no hay otro, Juan Camilo Mouriño. Y se habla también en estos momentos de que en la Secretaría de Economía probablemente podría ser Eduardo Sojo, pero tiene una estrecha relación con la señora Marta, lo que lo podría descalificar.

En cuanto a las otras secretarías ahí vienen otros nombres, pero hay una que es importante saber, por ejemplo en la Secretaría de Seguridad Pública también se ha pensado en alguien que es secretario particular del presidente Fox y entonces aquí no se habla de la cercanía con la señora Marta, sino de una persona ajena.

Y esto tiene correlación de aquí no hay head hunters, de que aquí la gente está buscando de alguna forma que llegue el hombre que pueda tener un mayor contacto con el propio Felipe Calderón.

En la Secretaría de Comunicaciones y Transportes se ha venido descalificando a Javier Lozano y el que ha ido aumentando sus posibilidades se llama José González Morfín. Y bueno, la Secretaría de la Función Pública apunta a Germán Martínez.

Hay otros cargos, por ejemplo la Secretaria de Turismo, ya sabe usted quién quiere, el que quiere es "El Negro", es el que quiere repetir, Rodolfo Elizondo Torres. No creo que se lo vayan a dar, pero bueno, ahí están las cosas.

Emilio Goicoechea es el secretario particular de Fox, es el que se dice está perfectamente desmarcado de la señora Marta y que podría ocupar un cargo en el próximo gabinete.


Por cierto, en su columna del domingo, Francisco Rodríguez hace una recopilación de la controvertida lista que tienen los empresarios aglutinados en el CCE:
... Aunque su dirigente José Luis Barraza lo desmienta, lo cierto es que sí están jugando y apostando fuerte, ya que al interior de la cúpula empresarial, la Comisión de Enlace Legislativo que preside Oscar Fitch Gómez se encargó de elaborar el análisis sobre el posible equipo de trabajo del presidente electo.

En el análisis realizado por los despachos de Fitch y Asociados y Solana y Asociados, se dan dos nombres para la SHCP: Agustín Carstens Carstens y Luis Téllez Kuenzler.

Para Economía: Eduardo Sojo Garza-Aldape; Luis Téllez Kuenzler y Juan Molinar Horcaditas, y para Energía: César Nava Vázquez, Juan Camilo Mouriño y Emilio Goicoechea Luna.

Para SCT: Javier Lozano Alarcón, José González Morfín y Humberto Treviño Landois. Pemex: César Nava Vázquez, Juan Camilo Mouriño, Alfredo Elías Ayub, Jesús Reyes Heroles González Garza y Luis Téllez Kuenzler.

Alejandro Zapata Perogordo, Gonzálo Moctezuma Barragán y Genaro Borrego Estrada apuntan para Trabajo, y para Agricultura: Ernesto Ruffo Appel, Alberto Cárdenas Jiménez y Abraham Uyeda,


Para Gobernación: Francisco Ramírez Acuña, Josefina Vázquez Mota y Juan Molinar Horcaditas. Para Relaciones Exteriores:Andrés Rozental Gutman, Arturo Sarukán Casamitjana y Jesús Reyes Heroles González Garza.