Dice A Puerta Cerrada:
Le bastó un golpe de timón a Espino para derrumbar una cuidadosa estrategia de hace muchos meses. ¿Quieren azul celeste...? Que les cueste. Y propuso adelantar la fecha para la sucesión interna.
Todo ante las caras de what?!, desconcierto, sorpresa, confusión y desorientación. Fue tal el KO que algunos despistados ya no sabían qué hacer con su simpática playerita. Nava y Martínez se descompusieron, ahora imagínese a Calderón. Cómo rayos no pudo desintegrar a Espino y apoderarse del PAN...
Todavía faltan sobresaltos en este capítulo azul con todo y que Germán y Manuel tuvieron ayer domingo antes del Consejo, a urgente petición del primero una muy, pero muy interesante reunión. Y recuerde que hoy, my friend, se define la ruta... ¿de colisión?
Comienza así Marcela su columna:
La derrota en una batalla no es el mayor de los males, mi estimado, salvo cuando la inflinge un enemigo considerado como indigno. Manuel Espino, con su simpática estrategia del pasado fin de semana, asestó un KO técnico al Gymboree de Los Pinos, a Felipe Calderón y a su delfín Germán Martínez, quien recientemente renunció a la SFP para competir por la dirigencia blanquiazul. Como ya va siendo enfermiza costumbre, las formas dijeron todo del fondo.
Y afirma en el cuerpo de la nota que puede leer íntegra aquí:
La anticipada renuncia de Martínez Cázares y su inédita cargada organizada por Los Pinos la tarde del viernes pasado en un hotel de la capital terminaron por ponerle los estupendos puntitos a las íes. La señal era clarísima. Algo así como compañeros, llegó la hora para aplastar a Manuel y darle su última rociada de flit.
F. Bartolomé, el columnista camuflado de Reforma, en cambio, da en su Templo Mayor, el triunfo a Felipe Calderón:
HAY AUSENCIAS que triunfan y la de Felipe Calderón en el Consejo Nacional del PAN también triunfó.
POR MÁS QUE Manuel Espino quiso mostrarse sonriente, la realidad es que no le fue muy bien este fin de semana.
Y ES QUE en los dos días que duró la reunión del máximo órgano panista, su dirigente nacional salió por todos lados espinao.
CALDERÓN optó por poner tierra de por medio yéndose precisamente este fin de semana a su tierra, Michoacán, como una manera simbólica de decir que no intervendría en las decisiones internas de su partido.
PERO no hay que confundirse: Calderón no estuvo presente pero sí su equipo -encabezado por César Nava-, que ganó varias batallas a los espinistas en el Consejo Nacional.
DE ENTRADA Espino vio reducirse su mandato, con todo y que formalmente él fue quien propuso adelantar las elecciones panistas.
ADEMÁS el líder de los panistas también terminó cediendo para que se proscribiera dentro del partido la existencia de grupos secretos, en clara referencia al Yunque de su corazón.
Y, POR SI FUERA POCO, Espino también tuvo que ceder a la presión interna y terminó perdiendo espacios de control a manos de los calderonistas.
CUENTAN que ambos equipos estuvieron negociando hasta bien entrada la madrugada del domingo las comisiones del Consejo Nacional, en las que al final los calderonistas lograron importantes espacios.
Ricardo Alemán, por su parte, considera en El Universal que Manuel Espino intentó forzar a los calderonistas a conformarse con una sucesión compartid:
Al final de cuentas —y una vez que movió de manera equivocada sus piezas en el ajedrez de la sucesión en Acción Nacional—, cuando el señor Manuel Espino propone adelantar el cambio de dirigente nacional en el PAN, no es porque tenga posibilidad alguna de triunfo —aun si decide buscar la reelección, lo cual es casi un hecho—, sino que busca rescatar el capital político que le permitiría forzar la elección por la ruta de un acuerdo de sucesión compartida. Es decir, pretende impedir una derrota aplastante que dejaría totalmente fuera de la nueva dirigencia a los grupos de extrema derecha. Lo que no sabe es que en la dirigencia de Germán Martínez no habrá “purgas”, sino que se acotará a la extrema derecha. Al tiempo.
Alemán apunta en su Itinerariio Político que Calderón sacó de la manga a Germán Martínez, y no a César Nava, lo que colocó a Espino en un predicamento.
El dirigente del PAN pretende impedir una derrota que dejaría fuera de la nueva dirigencia a la extrema derecha, afirma en la columna que puede usted leer íntegra aquí.
Ahí mismo en El Universal, Salvador García Soto, apoya la teoría de un acuerdo entre las partes, y supone que la decisión del PAN de adelantar la elección de su dirigente nacional, a propuesta de Manuel Espino, apunta a que ya hubo una negociación entre los dos bloques en que está dividido el panismo: los empoderados calderonistas y los ultraconservadores.
Agrega en Serpientes y Escaleras:
Casi podría decirse que al pedir que se apresurara su relevo, Espino está recapitulando y decidió evitar la batalla que se hubiera dado con supremacía de fuerzas de los calderonistas, que controlan la mayoría absoluta del Consejo Nacional que elegirá al nuevo dirigente. Lo que hacen Espino y los grupos de ultraderecha que le acompañan es dejarle el paso libre a Germán Martínez Cázares, aunque es muy probable que detrás de esa “generosa y visionaria decisión” —como calificaron los panistas al gesto de Espino—, haya una negociación de muy alto nivel para apoyar a Calderón y a su candidato.
Y se pregunta si tendrá algo que ver el caso del enriquecimiento y los escándalos por las propiedades y lujos de Vicente Fox.
¿no será que Espino ya pactó con los calderonistas a cambio de que no molesten al ex presidente, con el que siempre ha tenido fuertes ligas políticas y económicas?..