En Los Pinos preparan la caballería

A Carlos Medina le pronostican muchas dificultades para llegar a la presidencia del PAN. Entró en conflicto con la residencia presidencial de Los Pinos. Así, al menos, lo dice A puerta cerrada la señora Marcela Gómez Zalce, en su columna de Milenio:

Turns out que la distancia entre las familias custodias del PAN y Los Pinos & surroundings es cada vez mayor, y ya llegó al punto de no retorno. Es decir, la lucha entre estos divertidos grupitos por la presidencia de Acción Nacional y la candidatura azul rumbo al año 2006 está básicamente poniéndose de pelos. ¿Por qué?

El jueves de la semana pasada, querido lector, Carlos Medina Plascencia dio una interesante entrevista al periódico El Universal, en la que, en pocas palabras, expresó que Santiago Creel incumplió un acuerdo cupular (¿qué... hay de otros?) donde todos acordaron sumarse a la tan preciada candidatura única por la presidencia blanquiazul. Y, ese lindo día por la tarde, Carlitos recibió una chistosa llamada de Emilio Goicoechea —le recuerdo, just in case, que es el secretario particular de Fox—, quien con voz seria y firme le dijo que tenía un mensaje de parte del mismísimo Ejecutivo. Do I have your attention now?

El recado, esencialmente, fue dejarle muy claro a Medina que el inquilino de Los Pinos (& Co.) estaba molesto (o sea, muy enchilado) por sus declaraciones contra Santiago, en el sentido de que éste había quebrado ese mentado pacto, el cual, mi estimado, nunca existió, pues. Y con la pena, mi Carlos, de entrada ya estás descalificado para portar el silbato de árbitro. En otras palabras... next!, y si sabes contar, no cuentes con nosotros. Why so?

Para nadie es un secreto que Creel tiene el beneplácito de la parejita presidencial y una bola de divertidos cuates, y las palabras de Medina cayeron como balde de agua helada en varios ánimos, además de dejar un mal sabor de boca mezclado con repudio y desdén. Which is not a nice combination. Sigamos.

En una frase de esa entrevista, mi estimado, Carlos expresó: “Santiago... te equivocaste”. Y en Los Pinos se interpretó como... nos late que la equivocación fue de otro. Conjuntamente, el ex gobernador de Guanajuato y actual candidato para suceder a Bravo Mena se aventó (a la alberca sin agua) otro enunciado de campeonato: “Como dirigente del PAN no trabajaré ni en favor ni en contra de la candidatura presidencial de nadie...”. Entonces, ¿cómo quieres que interpretemos la rudeza innecesaria contra el inquilino de Bucareli, que es nuestro gallo... have you lost your mind?

Tan fue así, amable lector, que Santiago salió rápidamente a declarar que lo dicho por Medina era totalmente falso, porque ese acuerdo nunca existió. So, it is war then.

El domingo pasado, Francisco Barrio salió muy valientote a declarar que hay un claro espaldarazo de Vicente Fox a Creel para 2006 y ayer, my friend, Luis Felipe Bravo Mena expresó que Acción Nacional teme el voto de castigo en los comicios del año próximo y que el éxito del proyecto de Fox requería más panistas en el gabinete. ¡Tómala!

Y para cerrar, Felipe Calderón respaldó a su travieso grupito y entre todos —desde Ixtapan de la Sal— le exigieron a Fox sacar las manos del proceso y mantenerse al margen de la contienda interna. ¿Sugestivo, no cree?

En resumen, mi estimado, en el rebaño azul la guerra ya está declarada. Por una parte, las familias custodias del PAN empezarán a cobrarle facturas al Ejecutivo y a lanzarle dardos llenos de tóxico veneno. Mientras, en Los Pinos se estudian estrategias y se preparan traviesos X files para ponerles a varios un estáte quieto.

Lo verdaderamente divertido es que Carlos Medina empieza a tener problemas para juntar el número de consejeros necesarios para alzarse con una cómoda victoria y el conflicto desatado por sus declaraciones, aunados al efecto dominó que se ha registrado en los últimos días, pronostica que su relación ha quedado irremediablemente fracturada con la pareja presidencial. Entre tanto fuego amigo una cosa queda bastante clara, my friend.

Sin el apoyo del inquilino de Los Pinos y toda la maquinaria que aún posee, estos chicuelos no van a llegar. No olvide por favor el efecto llamado Marta Sahagún, quien tendrá simpáticas fichas para jugar rumbo al accidentado 2006. Si le suma que ya tienen en la mira a los funcionarios que se hicieron bolas acudiendo al destape de Medina, no descarte algunas sorpresitas.

Así que corra por sus palomitas and prepare yourself, porque, como dijera un clásico, lo mejor está por venir...