Esto podría cambiar si se cumple el pedido para que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) declare al lugar Patrimonio de la Humanidad.
Se trata de un lugar sagrado por ser sede de un santuario para el sintoísmo, una religión nativa del país nipón basada en el culto a los espíritus de la naturaleza.
Okinoshima alberga al santuario de Okitsu, dedicado a la diosa Tagorihime, según explica el Japan Times.
Okinoshima alberga al santuario de Okitsu, dedicado a la diosa Tagorihime, según explica el Japan Times.
No pueden contar nada
Entre los siglos 4 y 9, cerca de esta y otras islas de lugar pasaban las rutas de comercio que iban de Japón a China y la península de Corea, por lo que se instalaron lugares sagrados para velar por el buen viaje de los navegates.
Solo por un día al año, pueden entrar 200 personas que deben ser seleccionadas por los monjes y que no pueden llevarse nada del lugar.
Quizás el aspecto más polémico y peculiar de la tradición en esta isla es la prohibición del ingreso a mujeres. Los motivos no están claros. “Hay varias explicaciones, algunos dicen que la menstruación ‘ensuciaría’ el lugar.
Quizás el aspecto más polémico y peculiar de la tradición en esta isla es la prohibición del ingreso a mujeres. Los motivos no están claros. “Hay varias explicaciones, algunos dicen que la menstruación ‘ensuciaría’ el lugar.
También hay dificultades para los hombres. Según la BBC, los hombres deben desnudarse y ‘purificarse’ para entrar y no pueden contar nada de su visita al salir.
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