Gil Gamés en su columna "Uno hasta el fondo", de El Financiero, cuenta que leyó con los ojos de plato que después de ocho horas de bloqueo en la autopista México-Puebla, la circulación se reestableció. ¿Qué cosa tan grave y terrible ocurrió para que una de las salidas y entradas a la Ciudad de México fuera sellada? Pues resulta que los vecinos de la colonia El Molino, en Ixtapaluca, exigían un puente peatonal. Como lo oyen: un puente peatonal que comunique a El Molino con la carretera a Puebla.
El meollo del asunto
Ah, Gamés violento, infractor de las buenas conciencias, infame neoliberal. Mju. O sea, quienes bloquean las carreteras son los buenos; quienes pierden horas y horas atrapados en un coche, esos no son nadie. Gil caminó sobre la duela de cedro blanco y se dio un tope en el muro sur del amplísimo estudio. Qué difícil es todo.
Ah, Gamés violento, infractor de las buenas conciencias, infame neoliberal. Mju. O sea, quienes bloquean las carreteras son los buenos; quienes pierden horas y horas atrapados en un coche, esos no son nadie. Gil caminó sobre la duela de cedro blanco y se dio un tope en el muro sur del amplísimo estudio. Qué difícil es todo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario