Pepe Cárdenas en su columna Ventana, de El Universal, considera que para el gobierno, Javier Duarte es un trofeo de caza, aunque esté fuera de casa.
Para el resto de los mortales nacionales, el ex gobernador veracruzano es un cínico cobarde que se escondió seis meses después de robar seis años.
Verlo tirado en el piso de una jaula rodante, esposado, impotente, derrotado, hundido, con la panza de fuera, preso dentro de un chaleco blindado, dos tallas más chico que su cuerpo obeso, resulta una imagen tan poderosa como una extradición.
El meollo del asunto
La fotografía de ayer en la portada de El Universal es caricatura patética; vale más que mil palabras, quizá millones de votos, pero votos en contra de un partido que por culpa de sinvergüenzas como Duarte parece haber transitado de la democracia a la cleptocracia, apunta, con acidez el analista Juan Pardinas.
Aquí la columna
++++++
SUSCRÍBETE gratis al Boletín de la Hora Cósmica. Recibirás de lunes a viernes a primera hora la información más destacada. PICA AQUÏ
++++++
No hay comentarios.:
Publicar un comentario