A saber: que la epidemia de gobernadores delincuentes que llenan nuestras noticias no son solo un problema de corrupción o cleptocracia personal, sino un problema de malas reglas y de incentivos perversos en el pacto fiscal del federalismo mexicano.
Ese pacto deja en los estados mucho dinero suelto del que no hay que rendir cuentas.
El meollo del asunto
Ese es el origen estructural de la epidemia de escándalos de gobernadores que vemos, con lo que quiero decir que la epidemia tiene cura, puede arreglarse cambiando las reglas del pacto y realineando los incentivos.
Es un hecho que la democracia descentralizó el gasto público federal y enriqueció a las haciendas estatales, pero no las hizo responsables.
El dispositivo que convirtió la abundancia presupuestal de estos años en una invitación a la irresponsabilidad financiera y a la corrupción fue el concepto mal entendido, entendido abusivamente, de la soberanía estatal.
El dispositivo que convirtió la abundancia presupuestal de estos años en una invitación a la irresponsabilidad financiera y a la corrupción fue el concepto mal entendido, entendido abusivamente, de la soberanía estatal.
Aquí la columna
++++++
SUSCRÍBETE gratis al Boletín de la Hora Cósmica. Recibirás de lunes a viernes a primera hora la información más destacada. PICA AQUÏ
++++++
++++++
SUSCRÍBETE gratis al Boletín de la Hora Cósmica. Recibirás de lunes a viernes a primera hora la información más destacada. PICA AQUÏ
++++++
No hay comentarios.:
Publicar un comentario