Debate presidencial en Estados Unidos pone de nuevo a Mónica Lewinsky en el candelero

Mónica Lewinsky trata de evitar mezclarse con la política por estos días, luego de la aventura amorosa que tuvo en la Casa Blanca con el presidente Bill Clinton hace dos décadas la hiciese famosa en todo el mundo, informan agencias.

Lamentablemente para ella, la campaña presidencial la ha puesto nuevamente en el candelero.

En el primer debate entre Hillary Clinton y Donald Trump, el magnate, que se ha casado tres veces, aludió a los problemas matrimoniales de su rival y mencionó las infidelidades de Bill Clinton, aunque sin ahondar en ello. El candidato republicano dice que no tocará el tema en el debate del domingo, pero es sabido que cambia a menudo de parecer.
"Veamos qué pasa", declaró en un acto de campaña el jueves en New Hampshire.
Clinton seguramente tampoco quiere revivir esa época. Pero su portavoz Brian Fallon dijo que cualquier dardo que tire Trump se volverá en su contra, pues demostrará lo "combustible y errático" que es. Algunos analistas opinan que Trump se expondría a generar una corriente de simpatía hacia Clinton, la mujer engañada, que no lo ayudaría en nada a ganarse el tan necesitado apoyo de las mujeres.

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