Alguien en su oficina debió aconsejarlo sobre la impertinencia de enviar mensajes tan contradictorios. Hace dos años fue Luis Videgaray quien, desde la Secretaría de Hacienda, propuso la liberación del precio de la gasolina. Él es responsable principal del argumento que hoy tiene encabritados a los mexicanos. Si realmente Peña Nieto compartiera la molestia que genera esta medida no habría aprovechado el momento para tan falsa empatía hacia los ciudadanos.
El meollo del asunto
Esta fue la primera mentira del discurso que pronunció el Presidente el día de ayer. Luego vino el segundo embuste: dijo que el gasolinazo no se debió a la reforma energética. Y sin embargo tal reforma previó la entrada de competidores al mercado de combustibles —diesel y gasolina— para romper el monopolio de Pemex. Con este objeto se modificó el esquema de precio único liberando el costo en casi un 20%.
Que el gasolinazo no fue causado por la reforma hacendaria es el tercer engaño. En esa otra iniciativa se previó que el precio de ambos hidrocarburos sería determinado por los valores internacionales. Hasta diciembre pasado, México contaba con una banda que establecía mínimos y máximos en el precio, independientemente de lo que sucediera con el valor de estos productos fuera del país.
Aquí la columna
++++++
SUSCRÍBETE gratis al Boletín de la Hora Cósmica. Recibirás de lunes a viernes a primera hora la información más destacada. PICA AQUÏ
++++++
++++++
SUSCRÍBETE gratis al Boletín de la Hora Cósmica. Recibirás de lunes a viernes a primera hora la información más destacada. PICA AQUÏ
++++++
No hay comentarios.:
Publicar un comentario