Campañas en Puebla, bajo el signo de la decepción: ni debate, ni movilizacion, ni entusiasmo

La Hora Cósmica

Por Cosme Haces

Las campañas electorales en Puebla transcurren bajo el signo de la decepción.
No hay contienda política, debate público, movilizacion ciudadana, entusiasmo cívico, ni esperanzas renovadas.
Lo que destaca son los pleitos de barandilla entre partidos y candidatos.

Y una intensa guerra de lodo que desnuda la calaña de los dos principales contendientes, al parecer sin mayores consecuencias en el terreno de lo legal.
Se acusa, se desmiente, se insiste y se exagera.
Y no pasa nada.
Bueno, sí pasa algo: crece la desconfianza en candidatos e instituciones, crece el desánimo en el votante y con él la abstención.
Se impone el criterio de elegir entre dos males, al menor.
Y todo esto se confirma en los números y en los análisis de los observadores, los columnistas locales que siguen paso a paso el proceso.

Números

Hoy mismo, el portal del diario Cambio, publica su encuesta semanal, en la que los resultados apenas se mueven respecto a los que se registraban hace un mes al inicio de la contienda: Una ventaja contundente de Antonio Gali, un estancamiento en los resultados de Blanca Alcalá y una confirmación de que la candidatura independiente de Ana Teresa Aranda no entusiasma.
Gali pierde tres puntos y Blanca gana uno. Abraham Quiroz, de Morena, sigue en su mismo nivel del principio: 11 puntos.
Roxana Luna gana un punto, para dejar el último lugar a Ana Teresa Aranda, que rasguña los cuatro puntos de intención de voto.
La fotografía del momento es prácticamente la misma que hace un mes.
Y la esperanza es que el debate del día 12 finalmente tenga un impacto en el electorado y mueva las cifras.
Vana esperanza, según las perspectivas.
Porque el famoso debate apenas va a tener difusión. Su transmisión por un canal local de televisión, va a competir con la de dos partidos de futbol: los cuartos de final de la Liga MX entre Santos y Pachuca, y el clásico entre Guadalajara y América.

Weba

Vana esperanza también, porque el formato del debate ya está empañado por la mordaza del IEE que los columnistas locales han criticado hasta el cansancio.
Más que debate va a ser una payasada, escribe Rodolfo Rivera Pacheco en Status.
El debate del jueves 12 de mayo es, sin duda, otra evidencia de la parcialidad y falta de independencia de la mayoría de los consejeros del OPLE de Puebla, opina Rodolfo Ruiz en e-consulta.
Total, que lo más destacado de las campañas ha  sido la danza de los millones sobre el enriquecimiento inexplicable de los candidatos.
Una danza a la que ahora se agregó la denuncia anónima de que partidos y gobiernos han canalizado millonadas a Televisa en convenios sin comprobante para promoverse.
Televisa y los gobiernos implicados, entre ellos el de Puebla, han desmentido la versión, pero la duda ahí queda.
Como queda la duda sobre las acusaciones que los dos principales partidos se lanzan con entusiasmo.
La duda inhibe al elector.
Y la contienda se ha convertido, como también escribe hoy Joaquín López Dóriga en Milenio, en una campaña de "weba".

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